El ceremonial de los entierros de los Fonseca en Coca  

      A raíz de la muerte, en 1593, de don Francisco de Fonseca, VI señor de Coca y Alaejos, todos los miembros importantes de la familia residen en Valladolid, y ahí mueren. Pero al tener su panteón familiar en la iglesia de Santa María de Coca son enterrados en dicho templo. Veamos el boato de esas exequias, dignas de una representación.


      Murió el Conde de Ayala, don Antonio de Fonseca, primero Conde de Ayala, en principio de diciembre de este año de mil y seiscientos cinco años; el qual se mandó enterrar en su capilla de Coca y entierro en la forma siguiente: 

      Murió en Valladolid y trajéronle el Marqués de la Mota y todos sus criados y del conde, con lutos; acompañaron su cuerpo doce frailes franciscos y doce de la Vitoria; entraron de noche en Coca, pusiéronse en orden y tomaron todos achas encendidas antes de San Salvador(1), y entraron por la villa y le depositaron por esta noche en San Francisco de esta villa(2). En la mañana le sacaron en ombros los frailes descalzos asta cerca de la Cruz(3), donde le entregaron al marqués como el arvaceso (sic), y le llevaron en ombros los enlutados asta la Puerta de la Villa; y allí, puesto un túmulo o bufete, se le dijo su responso y luego le tomaron en ombros los regidores de esta villa y le trajeron asta frontero de la imagen de Nuestra Señora, a la entrada de la iglesia do estaba otro bufete; y allí se le entregaron, descubriéndole, a el capellán mayor, y él y sus capellanes le recivieron en ombros y le pusieron en su túmulo en medio de la capilla maior; y en cada parte do se detenía el cuerpo se decía un responso. 

      El orden que llevaron las cruces y clerecía fue: que dijo la misa el cura y se vistieron los veneficiados, acompañó el cavildo y capellanes y demás clerigos, y el cavildo de la tierra llevaron mano derecha del preste, el capellán maior la izquierda, el abad de el cavildo de San Agustín por ser cura, el vicario, luego los curas de Coca y veneficiados y luego los de la tierra y luego los demás clérigos. Llevaron capas dos capellanes que nombra el capellán mior de los más antiguos. Fueron las cruces en esta orden: la primera la de la iglesia y luego San Justo y Pastor, luego San Adrián, luego juntas, de dos en dos, la de la mano derecha Villiguillo, a la izquierda la Nava, luego juntas Santiuste y la Fuente, luego Villagonçalo y Ciruelos, y ansí las demás; y en el coro se guardó el mesmo orden; presidiendo el capellán maior. 

[…] 
  
      Murió mi señora doña Marina de Ulloa, Condesa de Ayala, señora de esta villa de Coca, en Valladolid, a veinte y cinco días del mes de abril de mil y seiscientos y veinte cinco años. Enterrose en la capilla de Santa María, entierro de los señores Fonsecas, en la sepultura donde estava enterrado el señor don Antonio de Fonseca Toledo y Ayala, su marido, primer conde de Ayala. Vinieron con su cuerpo el señor don Fernando de Fonseca, Conde de Ayala, y el señor don Pedro de Ulloa y Toledo, sus hijos y sus criados, y doce frailes dominicos y doce frailes franciscos; y todos con sus achas encendidas, desde la Puente de Piedra(4); llegaron con el cuerpo al convento de los frailes franciscos de esta dicha villa, donde quedó asta la mañana martes, que se hizo el entierro por la mañana en la forma siguiente: 

      Martes, 27 del dicho mes, salieron de Sancta María de esta villa las cruces de Villa y Tierra en este orden: la primera, junto al preste, la de Sancta María, la siguiente San Justo, la tercera San Adrián, que son las tres de esta villa; luego juntas, pareadas, Villiguillo y la Nava, yendo Villiguillo a la mano derecha; luego juntas Santiuste y la Fuente; luego Villagonçalo y Ciruelos; luego Navas de Oro, la Moraleja no bino. Va vestido de preste el cura Santa María, que dice misa y ace el oficio, vistense con él dos veneficiados. Va a la mano derecha del preste el capellán mayor de los señores Fonsecas, y a la izquierda el abad de San Agustin de esta villa, y en orden los demás clerigos. Desde San Francisco a la cruz puesta junto a las guertas, traen el cuerpo los frailes descalzos por salir de su casa, y allí está un bufete donde le asientan y dicen un responso; y de allí le toman los criados y llevan asta la Puerta de la Villa donde se dice otro responso; y allí le toman los regidores y llevan asta la puerta de la iglesia, donde se dice otro responso; y allí le toman el capellán maior y capellanes y llevan asta el túmulo que está en medio de la iglesia, adornado de luto y luces. Hácese el coro abajo, a la puerta de los pies, presidiendo el capellán maior, dícese un turno y acabado se dice la misa, y desde el túmulo a la sepultura llevan el cuerpo los capellanes. 

(1).- Antigua iglesia y posterior ermita en el llamado Camino Real de Valladolid, en las inmediaciones de la Cuesta del Mercado.
(2).- Convento de franciscanos.
(3).- Cruz de granito a la entrada de la villa conocida como Cruz de Septién.
(4).- Puente Grande.

Felipe Rodríguez Martínez, Cronista Oficial de Coca y su Tierra
Del libro La Historia desconocida de Coca, inédito